ALMACEN MAYORISTA DONDE LA PAUSA NO ES UN DESCANSO

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distribucuón canasta básica
 
Estos hombres no renuncian a una pausa, pero tampoco conocen el descanso. Aquí no hay ni hora, ni día de la semana. Una jornada puede comenzar en la noche y terminar en la madrugada o viceversa. Así trabaja el grupo del almacén mayorista de Buenaventura donde se recibe y distribuye a toda prisa la mercancía para la canasta básica del municipio de Calixto García. 
Este sábado desde bien temprano comenzó el traslado del azúcar y el aceite qué estaba pendiente de febrero en todos los Concejos Populares.
Los productos no llegan completos, las rastras arriban cargadas del puerto de Vita o de otras provincias y apenas permanecen horas en este caluroso recinto situado a un costado de la carretera central. Un pandilla de braceros de diferentes edades se ríen de la cantidad de sacos y bultos. La permutan inmediatamente hacia vehículos calixteños de forma inmediata en un alarde de sacrificio, entrega, voluntad y disciplina.
Los sacos de arroz, chícharros y frijoles vuelan sobre sus hombros a sabiendas de que más de 52 mil calixteños esperan en barrios y comunidades.
No importa si la entrega está al doblar la curva, en Buenaventura o habrá que sortear caminos difíciles para llegar a la Setenta, Ojo de Agua, Monte Alto, La Torcaza, Janata, Guaramanao, La Jíquima, Vista Hermosa, Sabanazo, Padierne, Las Mantecas, La Asturiana o Palmarito.
Cuando el último saco es levantado y parece que se asoma un descanso, se siente el claxon de una un camión remolque que llega con otra carga. No hay tiempo que perder, comienza otra tanda y habrá que asumirla con el mismo buen humor de cada jornada.
Unas veces toda la noche, otras la madrugada entera. En las últimas fechas sin electricidad. No hay días ni horas, no queda espacio para remolonear y mucho menos rendirse. Estos hombres que comanda José Luis Téllez ,merecen todo el reconocimiento. Su aporte es decisivo.
Escrito / Ernesto Vera González